Música, coreografías, color y tradiciones en el homenaje que ofreció la UNACH a Marta Arévalo de Alaminos
- Cientos de personas acudieron al Auditorio Los Constituyentes
- Se presentaron bailes representativos de Michoacán, Veracruz, Sinaloa, Chihuahua y Chiapas
Música, color y tradiciones formaron parte de las elaboradas coreografías que retrataron las culturas de los estados de Michoacán, Veracruz, Sinaloa, Chihuahua y Chiapas, en el homenaje que la Universidad Autónoma de Chiapas ofreció a la fundadora del Ballet Folklórico de esta institución, Martha Arévalo de Alaminos, que también celebró el 38 aniversario de su creación .
Fue así que por espacio de dos horas, cientos de personas que acudieron al Auditorio Los Constituyentes de la UNACH, disfrutaron de un espectáculo que recrea a través del baile y la coreografía costumbres que forman parte de la historia de nuestro país.
En el evento lleno de emotividad donde estuvieron presentes familiares, amigos y alumnos, los ejecutantes de los bailes dieron la mejor de sus presentaciones, lo que mereció el aplauso incluso de la homenajeada que en primera fila presenció la obra de la cual es creadora.
En este escenario emblemático de la Universidad, la Máxima Casa de Estudios entregó un pergamino que reconoce la trayectoria de Marta Arévalo de Alaminos, quien en 1975 fundó el Ballet Folklórico de la UNACH, y a lo largo de más de 60 años ha dedicado su vida al rescate de la historia de las danzas que hoy fueron recreadas por sus propios alumnos.
Fue un momento que sin duda quedó grabado en los corazones de cada uno de los asistentes que por varios minutos aplaudieron a Marta Arévalo de Alaminos, quien nuevamente pisó el escenario y antes de emitir su mensaje dio incluso muestras de su talento para el baile folklórico.
Emocionada por los recuerdos que le han dado los años, Marta Arévalo de Alaminos expresó “le doy gracias a Dios porque en la vida me tocó hacer esto, hice esto porque amo este lugar, esta tierra mía, todos ustedes son mi familia, mi gente”.
Arévalo de Alaminos resaltó que el baile folklórico es la esencia de un pueblo, por ello, quien se dedique a esto debe hacerlo con todo su alma y fervor, sin prejuicios raciales, “el baile a mi me dio la oportunidad de conocer toda la República Mexicana, Sudamérica, Centroamérica, Europa y Estados Unidos”.
Al ser entrevistados sobre la vida y obra de la homenajeada, sus alumnos la definieron como una mujer entregada a su trabajo, cariñosa y estricta en la enseñanza del arte de la danza, representando para ellos un orgullo haber sido formados bajo los conocimientos que transmitió a cada momento.
Externaron que la maestra Arévalo de Alaminos inspira a conocer la tradición y la cultura de los pueblos, además de que transmite amor y pasión por este arte que se refleja en cada ejecución que se presenta en los distintos escenarios donde su obra se ha expuesto.
Además de maestra de innumerables generaciones, en el área de la investigación recreó las danzas de “Los Parachicos”, “Poj Col”, “La Encamisada”, “Margaritas”, “Los Gorriones”, “Los Pastorcitos”, “El Venadito”, “El Tigre y el Monito” y “La Quema de la Candela”, a las cuales insertó elementos teatrales para ambientar escenográficamente los cuadros que ha planteado como parte de las costumbres chiapanecas.